Palestina avanza con su denuncia a Israel ante la ONU por la expansión de colonias

El  gobierno palestino solicitó al Consejo de Seguridad de la ONU una acción “urgente” para presionar a Israel a detener la expansión de sus colonias en Cisjordania y Jerusalén este. Advirtió que podría denunciar al Estado judío por crímenes de guerra si continúa con estas medidas.

El Gobierno de Israel aprobó la semana pasada la construcción de 3.000 nuevas viviendas en barrios palestinos de Jerusalén este y en los territorios ocupados de Cisjordania en respuesta al reconocimiento de Palestina como Estado observador no miembro de la ONU por parte de la Asamblea General.

Pese a que la medida recibió una ola de críticas de Estados Unidos y países europeos, un vocero oficial israelí dijo que el gobierno del primer ministro Benjamin Netanyahu decidió además seguir adelante con dos proyectos para construir 4.200 viviendas en dos colonias en las zonas de Ramat Shlomo y Givat Hamatos.

El proyecto de Ramat Shlomo causó una crisis diplomática con el gobierno del presidente estadounidense, Barack Obama, porque fue anunciada sorpresivamente durante una visita a Israel del vicepresidente Joe Biden justo cuando Washington buscaba frenar la expansión de las colonias para relanzar el proceso de paz.

El redoblamiento de la colonización israelí en tierras que los palestinos reclaman para su futuro Estado es el motivo central del estancamiento de ya cuatro años en las conversaciones de paz regionales y fue uno de los factores que empujaron a los palestinos a pedir su nuevo estatus a la ONU.

Desde 1967, año en que Israel capturó Cisjordania y Jerusalén este en una guerra contra países árabes, unos 500.000 colonos judíos se establecieron en esos lugares, donde viven entre más de dos millones de palestinos.

“El liderazgo palestino condena la última provocación de Israel y llama a la comunidad internacional a reafirmar su inequívoca condena a este tipo de actividades, que amenazan la viabilidad de la solución de dos estados”, afirmó el representante palestino ante la ONU, Riyad Mansour, en una carta al Consejo de Seguridad.

En la misiva, Mansour pidió al Consejo de Seguridad que actúe con “urgencia” para “salvar” la solución de los dos estados, que cuenta con apoyo mayoritario de la comunidad internacional, y que exija a Israel frenar su política de “colonización y agresiones” al pueblo palestino, informó la agencia de noticias EFE.

“Hay que mandar un mensaje claro a Israel para advertirle de que o pone fin a sus actividades ilegales o afrontará las consecuencias por obstruir los esfuerzos para la paz”, indica el embajador en la misiva, firmada por primera vez por el “observador permanente del Estado de Palestina ante la ONU”.

La carta no mencionó la posibilidad de demandar a Israel ante la Corte Penal Internacional (CPI) de La Haya, una posibilidad que se abre para los palestinos ahora que son Estado observador de la ONU, aunque de todos modos requeriría una serie de pasos por parte del tribunal y de los propios palestinos.

Sin embargo, Nabil Shaat, uno de los principales asesores del presidente palestino, Mahmud Abbas, dijo hoy a EFE que la decisión de Israel de ampliar las colonias los “empuja” a denunciarlo a la CPI.

“Israel nos quiere empujar a recurrir a la CPI. Si siguen construyendo asentamientos, no tendremos otra solución que acudir a la justicia”, declaró Shaath. “Cuando cometes crímenes de guerra, tienes que enfrentarte a las consecuencias. Si no quieren ir a la CPI, que no cometan crímenes. Y si no los han cometido, no debería darles miedo que los llevemos ante el tribunal”, añadió Shaath, quien preside el Comité Político de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP).

Los palestinos acudieron hace dos años a la CPI para denunciar lo que consideraban crímenes de guerra cometidos por Israel en su operación contra la Franja de Gaza “Plomo Fundido”, en la que murieron más de 1.400 palestinos, en su mayoría civiles.

Pero la fiscalía del tribunal respondió que no podía atender la solicitud, al no ser Palestina un Estado.

Ayer, cinco países europeos -Reino Unido, Francia, España, Suecia y Dinamarca- convocaron a los respectivos embajadores israelíes para expresar su malestar por la decisión israelí de construir 3.000 nuevas viviendas en Cisjordania y Jerusalén este.

Idéntica medida adoptaron  Australia, un tradicional aliado de Israel, Brasil y Egipto, uno de los dos únicos países árabes que reconoce al Estado judío, informaron hoy las Cancillerías en Canberra, Brasilia y El Cairo.

En Londres, el canciller británico, William Hague, se sumó hoy a las advertencias palestinas y dijo ante el Parlamento que los planes de construcción israelíes harían “casi inconcebible” la creación de un Estado palestino al lado de Israel, el decir, haría inviable la solución de los dos Estados.

Algunos funcionarios palestinos hablaron de la posibilidad de pedir a la Unión Europea (UE) reconsiderar sus acuerdos comerciales con Israel, pero Hague dijo que no piensa que haya en Europa “mucho entusiasmo” a imponer sanciones económicas al Estado judío.

Esta entrada fue publicada en Actividades. Guarda el enlace permanente.

Los comentarios están cerrados.