Durante la ejecución de obras de mantenimiento en el cementerio musulmán de Yafa, los obreros hallaron media docena de fosas comunes que aparentemente se remontan a la guerra de 1948, cuando se estableció el Estado de Israel.
Dos de las fosas ya se han abierto y en ellas se han encontrado unos doscientos esqueletos correspondientes a hombres, mujeres y niños, algunos con signos de violencia.
La prensa local ha citado a un pescador de 80 años, Atar Zeinab -que entonces era un adolescente-, quien recuerda lo ocurrido en Yafa hace 67 años y señala que participó en algunos de los entierros que se llevaron a cabo en las fosas.
“Durante un período de tres o cuatro meses llevé al cementerio unos sesenta cuerpos. Habitualmente encontrábamos a la gente en la calle y ni siquiera sabíamos quiénes eran”, rememora Zeinab.
Los cadáveres se apilaban en el cementerio porque debido al conflicto no se podía hacer mucho más. “Los llevábamos de madrugada o durante la noche. Poníamos a las mujeres, los niños y los hombres juntos, y nadie rezaba por ellos”, asegura Zeinab.
Las tropas judías tomaron Yafa el 13 de mayo de 1948, dos días antes de que expirara el Mandato Británico. La ciudad, que dos años después fue incorporada oficialmente al ayuntamiento de Tel Aviv, es muy antigua y poseía un rico testimonio de las épocas romana y bizantina que en su mayor parte se ha perdido.
Algunos miles de palestinos que no huyeron ni fueron expulsados continuaron viviendo en Yafa, pero hoy es una ciudad mixta en la que también viven israelíes. La zona se ha revalorizado mucho y es caro vivir allí debido a la especulación, de manera que los palestinos poco a poco se van marchando.
El historiador israelí Ilan Pappe cuenta que en la toma definitiva de Yafa el 13 de mayo de 1948 intervinieron unos cinco mil efectivos del Irgún y la Hagana. Yafa fue la última ciudad palestina en caer y fue defendida hasta el final por un grupo de partisanos árabes encabezados por el cristiano Michael al Issa, unos 50 voluntarios bosnios y algunos cristianos de origen alemán que residían en Yafa desde hacía dos generaciones. En total, unos 1.500 hombres.
Fuente: Eugenio García Gascón, Blog Público – España