Middle East Monitor
Tras la negativa de las autoridades israelíes a autorizar la entrada en sus cárceles de equipos de médicos palestinos e internacionales se ha pedido que se lleve a cabo una investigación internacional sobre las condiciones en las que están encarcelados los presos palestinos gravemente enfermos.
Un comité nacional palestino para los asuntos relacionados con las cárceles afirmó que el círculo de la violencia física y psicológica contra los presos sigue haciéndose cada vez más amplio. “Esto exige un grupo de presión formado por grupos de derechos humanos palestinos, árabes e internacionales que reúna a la opinión pública mundial”. El propósito de este grupo sería ampliar las campañas de solidaridad y centrarse en el caso de los presos enfermos en las cárceles israelíes.
En una declaración enviada a los medios de comunicación locales el comité también pedía que se presione a las autoridades de ocupación israelíes para que cierren el hospital penitenciario de Ramle ya que carece de los elementos mínimos necesarios para ofrecer cuidados médicos. El comité pide también el cierre de la cárcel de Hasharon que carece de las condiciones humanas mínimas para mantener unas condiciones de vida razonables.
El comité pidió a Egipto que desempeñe un papel en la resolución de la crisis relacionada con los presos palestinos presionando a Israel para que implemente los términos del acuerdo al que se llegó para poner fin a la reciente huelga de hambre generalizada. Hace totalmente responsables a las autoridades de ocupación israelíes de las vidas de los presos enfermos y de aquellos que están en huelga de hambre y en aislamiento dentro de las cárceles, y confirma que continuará organizando actividades de solidaridad para lograr sus objetivos.